
Ok. Nunca pensé que mis 5 odios... llegaran a motivar tanta inspiración. Pero qué divertido ha sido ver los post y ver qué odian mis estimados amigos-del-blog.
Pero el último que leí, me llevó ha hacer una relación de ideas que me llevó a un recuerdo muy cagado.
En éste, Porter menciona los comentarios que luego las abuelas son tan desgraciadamente acostumbradas a hacer. En su caso "¿Ya te iluminó el Espiritu Santo?" .
Eso me llevó a todas las veces que he escuchado el tan mentado "Si Dios quiere". Hace que la espalda se me caliente (reacción común cuando pierdo la cabeza). Empieza por los riñones y se extiende, en reacción en cadena, en un nano segundo hasta las orejas. Cuando era una furiosa adolescente llegué a pelearme con mi abuela y con mucha gente por usar esa expresión.
Y antes de que pudiera razonar de esa forma, cuando era niña, un día esa misma frase desató que mi paranoia (la cual siempre ha estado) y mi en ese entonces peor miedo, La Bomba Atómica.
(paréntesis) ¿Por qué miedo a la Bomba Atómica?
Un día llegó a mis manos un libro, que ahora pensánsolo bien podía haber sido ruso. El tipo de las ilustraciones muy rusky y el tema era sobre cómo sobrevivir a una bomba atómica. Eran dos hermanos y en el refugio tenían colores y libros, pero no podían salir. De ahí mi espíritu investigador me llevó a averiguar más sobre el tema. Obvio Hiroshima y Nagasaki, veía las fotos detenidamente de los sobrevivientes y de cómo quedaban las ciudades. Luego pensaba en que durante la Guerra Fría, si a Rusia se le ocurría bombardear a Estados Unidos, era súper fácil que hubiera un error de cálculo y que la bomba cayera al ladito del target. Y pues ciao, ya no crecería ni me enamoraría, ni cogería, ni estudiaría en la universidad, ni haría nada de mi vida porque repentinamente moriría calcinada por la bomba atómica. Sí, todo eso pensaba de niña.
Un día, estando en una calurosa tardenoche regia, en el porche de la casa de mis abuelos, pasa la viejita vecina. "Buenas noches , doña XXXx", saluda mi abuela. "Buenas noches, si Dios quiere" Puta.
¿Qué? ¿cómo que si Él quiere? ¿Y qué si no quiere? ¿Qué si este ser decide que yo ya no debo de amanecer? No, vaya forma de mandarme a dormir. Afortunadamente al día siguiente seguía aquí y aún más feliz fui cuando descubrí que nada tiene que ver Dios en si amanezco al día siguiente, o de si logro algo, o de si me va bien o mal en el día.No,no es si Dios quiere... Es si tú quieres. Dios no tienen nada que ver, todo depende lo que tú hagas en esta puta vida.
A-Dios.