A ver si así aprendo mi lección

El martes fue el concierto de Roger Waters. Y mi narración no tienen nada que ver con la música sino con una ligera revelación que tuve. Pero que resulto ser muy dramática.

Es horrible darse cuenta y aceptar que la cagaste. Yo la cagué. Por mi culpa llegamos sólo a escuchar Dark Side of the Moon. Por mi necedad de ser una persona "civilizada" en momentos donde el simio impera, yo solita me chingué. Y en vez de ser un acto cívico, con una buena intención, como un látigo se regresó en contra mia. Por no querer meterme en la cola del estacionamiento y por hacerle caso al imbécil del estacionamiento que me dijo que había otra entrada dando la vueltecita sin saber qué estaba diciendo...escuché desde mi coche cómo ya había empezado el concierto. No saqué mi instinto de supervivencia y me llevó la fregada.

Dimos fácil 50 vueltas y nunca un sólo lugar. Mi rodilla casi explota de tanto meter y sacar el clutch. Presenciamos la necedad de un taxista que nunca entró en su minúsculo cerebro que hay veces que hay que dar un paso pá trás para poder avanzar. El taxista, en sentido contrario, sentía tener todo el derecho de que 10 coches se fueran en reversa para dejarlo pasar. Al final un trapero entendió la logística, intentó explicarla al ruletero y éste ante semejante osadía de contradecirlo, lo más lógico fue bajarse del vocho a puteárselo.
Lo bueno fue que ahí fue cuando me tranquilicé de llorar frustradamente por haberla cagado me di cuenta que ese (el taxista pederoputeador) era el peligro inminente.

Nunca en mi vida-y no es exageración- había sentido la frustración. Y eso que no soy tan fan, si hubiera sido fan, me da un infarto. ME DA UN INFARTO. Pero al final R encontró un camino, entendí que hay muchas veces en las que puedo estar mal y encontramos una entrada que cuasimilagrosamente se abrió. Eso sÍ, tuvimos que cruzar toda la pista pero llegamos a chingarnos un par de cervezas como si fueran limonada y todo bien. Escuchamos parte en el coche, no vimos al cochino volar, pero llegamos. Odio el puto tráfico y la falta de espacios para dejar el coche en esta clase de eventos.

Pero para ver si aprendo mi lección , decidí que iba a escribir mis lecciones hasta llenar lo largo de una hoja tamaño bond y luego repetirlas como un mantra para ver si así me ilumino.